La merced de nuestro Padre
Es un faro en su brillar,
Él nos cuida y nos protege
Con las luces de alta mar.
¡Mantened el faro ardiendo!
¡Arrojad su luz al mar!
Que si hay nautas pereciendo
Los podréis así salvar.
Reina noche de pecado,
Ruge airada negra mar,
Almas hay que van buscando
Esas luces de alta mar.
¡Mantened el faro ardiendo!
¡Arrojad su luz al mar!
Que si hay nautas pereciendo
Los podréis así salvar.
Ten tu lámpara encendida
Que en la tempestad habrá
Algún náufrago perdido
Y tu luz le salvará.
¡Mantened el faro ardiendo!
¡Arrojad su luz al mar!
Que si hay nautas pereciendo
Los podréis así salvar.